Samsung podría ofrecer smartphones con pantallas que se doblan o se enrollan en 2017. Así lo asegura la agencia Bloomberg, que dice que según sus fuentes uno de los modelos tendría una pantalla de 5 pulgadas en modo "cerrado", que se transformaría en una de 8 pulgadas al abrirse.
El proyecto, secreto hasta ahora, se conoce internamente como Project Valley y podría debutar en el próximo Congreso Mundial de Móviles, que se hace todos los años en febrero en Barcelona.
Samsung, como LG, tiene hace tiempo la capacidad de crear pantallas OLED hechas con un sustrato plástico (POLED) que les otorga cierta flexibilidad, como ofrece el LG G Flex; pero este nuevo diseño permitirá doblar el teléfono en dos.
Sony ofreció hace tiempo una tableta con dos pantallas unidas por una bisagra (la Tablet P, de 2011); en el diseño de Samsung no habría (en teoría) diferencia entre una y otra pantalla.
La mejor aproximación a lo que podríamos ver de Samsung es el prototipo de Oppo
(una compañía china que fue uno de los cinco mayores fabricantes de
smartphones del mundo en el primer trimestre del año) que se filtró por
estos días, y del que no se conocen más detalles que los que ofrece la
foto.
Una
gran incógnita estará en cómo protegerán la pantalla: el vidrio Gorilla
Glass que recubre la pantalla de los smartphones modernos (o el
Dragontrail de Asahi, su competencia) es rígido, al menos en su versión
actual, lo que conspira con el concepto de un teléfono plegable o
enrollable.
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